La importancia del cuidado íntimo en la menopausia
Menopausia
Los cambios de la menopausia también afectan a nuestra zona vaginal, lo que provoca molestias como picor, escozor y problemas en las relaciones sexuales. Productos como el ácido hialurónico o la centella asiática nos ayudarán a mantener en buenas condiciones esta zona.
En la menopausia es especialmente importante que tengamos una adecuada higiene íntima y le prestemos mayor atención al área genital ya que la aparición de la atrofia genital en esta etapa o incluso la incontinencia urinaria pueden magnificar las molestias.
En la menopausia coinciden bajos niveles de estrógenos, pH elevado (no ácido) y escasos lacto bacilos protectores de la mucosa vaginal. Las sensaciones incómodas, como escozor y prurito genital, de origen no infeccioso, son frecuentes por la sequedad y la atrofia, por lo que precisan una mayor hidratación y regeneración vaginal.
Atrofia genital
Esta molestia que afecta hasta el 50% de las mujeres en los primeros años de la menopausia, se caracteriza por la sensación de sequedad y la inflamación de los genitales, lo que provoca una especial sensibilidad y molestias con el roce o en las relaciones sexuales. También puede ocurrir en otras etapas por la falta de estrógenos es en el periodo de postparto y la lactancia.
La piel de la vulva y la mucosa vaginal pierden elasticidad y turgencia, la entrada a la vagina se estrecha, los labios menores desaparecen, y el interior de la vagina sangra al roce con más facilidad. Además, las relaciones sexuales duelen porque la vagina en esta etapa se acorta, se estrecha y es menos flexible.
Agentes ambientales
Existen irritantes físicos (como un pesario en casos de prolapso uterino) o químicos, que usados de forma mantenida pueden llegar a ocasionar síntomas y signos similares a los de la atrofia por falta de estrógenos.
Igual que cuidamos nuestro rostro o las manos, debemos incorporar productos que minimicen la atrofia o la sequedad vaginal en esta etapa
En la lista de alérgenos o irritantes químicos podemos enumerar: determinados perfumes, desodorantes, jabones, protectores de ropa interior, compresas absorbentes que no alejan la orina de tu piel, espermicidas, condones de látex, lubricantes o ropa ajustada o de composición sintética…
Si tienes pérdidas de orina, asegúrate de que las protecciones para la orina que utilizas son respetuosas con tu piel y están diseñadas para evitarte, entre otras molestias, la irritación de tu zona genital. Utiliza absorbentes que te den todas las garantías, como los de TENA Mujer.
Cosmética íntima a tener en cuenta
Igual que cuidamos nuestro rostro o las manos, debemos incorporar en nuestra rutina diaria algunos productos que nos ayudarán a minimizar los problemas de la atrofia o la sequedad en esta etapa. Toma nota:
- Gel limpiador que contenga aloe vera o árbol de té, con un pH 7, para proteger y calmar el picor propio de la vaginitis atrófica.
- El ácido hialurónico es un potente hidratante que puede utilizarse intravaginalmente en los casos en que nuestra sexualidad se vea afectada por molestias e incluso sangrados del epitelio vaginal, adelgazado y sensible en esta etapa.
- La centella asiática, que es un regenerante de la piel y las mucosas, puede ser muy útil también para nuestras relaciones sexuales.
- Los productos probióticos o que contengan extracto de arándanos mejoran la flora o ecosistema vaginal, ayudando a prevenir las infecciones genitourinarias.
Fuente: Dra. Gema García Gálvez