TENA
Logo

Home Mujer y bienestar Menopausia No te saltes la revisión ginecológica

No te saltes la revisión ginecológica

Menopausia


Mujer Madura en el ginecólogo
390 18534

Una de cada cinco mujeres declara no haber ido nunca al ginecólogo. Una cifra demasiado alta que implica repercusiones importantes en la vida de muchas mujeres. No seas una de ellas. Busca un profesional que te inspire confianza y vigila tu salud en esta etapa.


Compártelo con tus amigas:

Cuando una mujer va a tener un hijo es habitual que desee evitar riesgos y asegurarse de que todo va a ir bien. Por eso no duda en ponerse en manos de su ginecólogo o tocólogo. Si no lo hiciera, la consideraríamos una irresponsable. Pero, ¿qué pasa con el resto de etapas de la vida de la mujer que necesitan vigilancia? ¿Estamos igual de concienciadas?

El control médico habitual es una herramienta básica para la prevención de disfunciones y problemas de salud en la mujer. Es muy importante que nos concienciemos de que estos chequeos ginecológicos son imprescindibles a cualquier edad, desde que comienza la menstruación hasta la postmenopausia, poniendo especial atención en la menopausia, con todos los trastornos que puede acarrear (falta de lubricación, molestias en las relaciones, pérdidas de orina…).

Además, acudir una vez al año a la revisión ginecológica ayudará a diagnosticar problemas tan serios como el cáncer de mama y de útero, entre otros. Así que nuestra calidad de vida depende de ello. Sin embargo, según datos de la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia (SEGO), una de cada cinco mujeres no acude nunca a la consulta de un ginecólogo. ¿Por qué?

La principal causa de esto es que muchas sienten vergüenza y pudor a “desnudarse” física, y también psicológicamente, delante del médico. Les cuesta contar lo que les pasa, ya que a menudo está ligado a esferas de la vida privada como la autoestima o la sexualidad.

Cuestión de confianza

Sin embargo, hay que romper esa tendencia. Recuerda que el especialista es un médico, no te juzgará. Es la persona que está dispuesta a escuchar tus inquietudes y a orientarte sobre tus problemas de salud. Tienes que ver a tu ginecólogo o ginecóloga como a una amiga a la que consultar tus dudas.

Busca un profesional que te inspire confianza y seguridad. Plantéale qué te preocupa sobre los cambios que estás viviendo en la menopausia y en tu sexualidad, y si tienes pérdidas de orina, háblale de ellas con total confianza. Es la mejor forma de empezar a resolver el problema.

Especialista: ¿Hombre o mujer?

En un centro privado puedes elegir entre ginecólogo o ginecóloga. En los centros públicos, esta opción, suele ser más difícil. Muchas mujeres se sienten cohibidas si su médico es un hombre. Si no puedes elegir, recuerda que los ginecólogos están acostumbrados a la rutina de la exploración y a la desnudez de las pacientes. Y están preparados para indicarte, según el grupo de edad al que pertenezcas, qué pruebas necesitas para solucionar de la mejor forma posible tus problemas de salud.

Los hombres además son muy sensibles a esos sentimientos de miedo y vergüenza de la mujer y suelen tener un trato exquisito. Pero, si aún así te causa miedo o ansiedad acudir al ginecólogo, te recomendamos que pidas cita a primera hora de la mañana y tener todas las preguntas preparadas. Así la consulta será más llevadera.

De cualquier forma, tú tienes la última palabra. O deberías. Si estás más cómoda hablando con una mujer, porque piensas que entiende mejor lo que te pasa, o no te sientes a gusto con el médico que te trata (sea mujer u hombre), intenta cambiar de especialista. Debes poder hablar sin cohibirte de lo que te preocupa para que tu salud salga beneficiada.

La Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia recomienda acudir regularmente a la revisión o chequeo ginecológico. No te la saltes.

Fuente: Dra. Gema García Gálvez

Te puede interesar...

Compártelo con tus amigas:
Centrada en ti