La realidad es que necesitas hacer ejercicio, créelo. Es una etapa complicada. Hay baile hormonal, grasa que comienza a acumularse en sitios demasiado visibles, apatía y mal humor. Y para todo eso el ejercicio es solución. Está demostrado. Se regularán tus hormonas, recuperarás músculo, relajará tu estado de ánimo y te encontrarás mejor a todos los niveles.
Caminar es el comienzo para quitar el óxido
Necesitas poner en marcha tu corazón y quitar ese óxido que se ha ido apoderando de tus articulaciones. Si llevas tiempo sin moverte, caminar es la primera opción. Los especialistas recomiendan hacerlo a un ritmo constante durante unos 20 minutos por sesión cinco días a la semana. No es tan difícil, ¿verdad? A partir de ahí, no tardarás en notar cómo mejora tu capacidad de resistencia y podrás ir aumentando ritmo y tiempo. No te conformes con lo que te resulta más cómodo.
Bicicleta y bailar para perder peso
La menopausia suele traer aparejado un aumento de peso, y generalmente en sitios tan visibles como la barriga o los glúteos. El ejercicio no solo te ayudará a frenar ese aumento de kilos, sino que también compensará la pérdida de masa muscular tan común a partir de los 50 años. Los expertos recomiendan hacer actividad aeróbica vigorosa por semana en mujeres sanas. Bailar o hacer zumba son estupendas actividades. También caminar a buen ritmo o hacer bici. No tardarás nada en obtener niveles más altos de autoestima y calidad de vida.
Fuerza y flexibilidad para tus músculos y huesos
No solo es importante fortalecer tu corazón, sino trabajar fuerza, equilibrio y flexibilidad para mejorar tu masa muscular y articulaciones. Durante la menopausia se pierde calidad de huesos y músculos, lo que se traduce en menos fuerza para hacer las cosas y cierta inestabilidad que aumenta el riesgo de caídas. Puedes montarte un pequeño gimnasio en tu hogar sin problemas. Cómprate unas pequeñas pesas y camina si tienes un largo pasillo. En tu propia casa puedes cumplir perfectamente con esa cosa tan saludable que es dar 10.000 pasos al día.
Un beneficio para tu sueño y tu estrés
Si estás en puertas de la menopausia o ya te has adentrado en ella, sabrás lo difícil que resulta conciliar el sueño y tener un buen descanso. Y eso redunda en bajo rendimiento, mal humor, estrés… Pues debes saber que el ejercicio es la mejor medicina que puedes encontrar para dormir mejor. Las investigaciones han demostrado que la actividad física puede ser tan eficaz como el mejor de los somníferos. Cuando haces ejercicio, tu cerebro libera sustancias químicas que combaten el estrés y la ansiedad. Te aleja de los malos pensamientos cuando te vas a la cama y también te cansa, lo que te predispone para un mejor sueño.
Cuerpo sano, mente sana
Es uno de los refranes más antiguos del mundo, pero la ciencia demuestra que es verdad: un cuerpo sano también acarrea una mente brillante. Y si has notado en estos días una dispersión mental preocupante y problemas para acordarte de las cosas, sabrás de lo que hablamos. El ejercicio aumenta la frecuencia cardíaca y la oxigenación del cerebro y propicia una reactivación de las neuronas, entre otras cosas. Tendrás una memoria y concentración más nítidas, procesarás mejor la información y te ayudará en la toma de decisiones a todos los niveles.
Ejercicios de Kegel para fortalecer tu suelo pélvico
Hacer los eficaces ejercicios de Kegel te va a ayudar a fortalecer los músculos del suelo pélvico. Esto no solo contribuirá decisivamente a mejorar el control de la incontinencia y prevenir posibles complicaciones derivadas de ello, sino que también contribuirá a mejorar tu vida sexual, estado físico y fortalecer espalda y cadera.