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Bowspring, una nueva disciplina de ejercicios

Actividad física


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¿Has oído hablar del bowspring? Esta técnica de alineación corporal te ayudará más de lo que piensas. Te lo contamos.


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Si crees que ya lo has probado todo en el entrenamiento corporal es que no conoces Bowspring. Este sistema de alineación corporal tiene solo cinco años, pero ya se ha convertido en toda una revolución.

El sistema, que parte de la idea de que tu columna vertebral es flexible, concibe la espalda como un largo muelle dinámico y de hecho, eso es lo que sentirás al practicarlo. La postura que adopta la columna vertebral es dinámica y abierta y tiene forma de “S”.

Teniendo como eje el canal central, formado por cabeza, costillas y pelvis, se trata de activar el cuerpo en su conjunto, lo que genera un sentimiento de unidad y cooperación entre todas sus partes, que trabajan unidas: corazón (caja torácica), alas (hombros, brazos y manos), raíces (caderas, piernas y pies), cintura (abdomen y espalda baja) y corona (cuello y cabeza). En seguida notarás los efectos en todo el cuerpo.

En realidad, no se trata tanto de una técnica concreta, sino de un patrón que se puede aplicar a cualquier postura de yoga, movimiento corporal o entrenamiento atlético, así como al campo de la recuperación o la rehabilitación. Una vez que aprendes la plantilla puedes aplicarla a todas tus actividades diarias.

A través de la práctica notarás cómo cambia, por ejemplo, la forma en que te sientas o estás de pie en tu día a día, y esa es una de sus grandes ventajas. Además, en el Bowspring cuerpo, mente y corazón se conectan para generar un estado corporal y emocional positivos a través de esos tres centros:

  • La postura, el movimiento y la respiración (cuerpo)
  • Voluntad, determinación y enfoque (mente)
  • Responsabilidad, atención plena, compasión (corazón)

Si ya haces yoga, el enfoque en la unión cuerpo-mente no te resultará extraño.

La práctica es fluida, pues te moverás de una postura a otra, poniendo siempre la atención en la flexibilidad de tu cuerpo a través del alineamiento de la columna. Ahora bien, para que la práctica fluya activar la postura requiere de toda tu atención plena. Y es que este entrenamiento integra el fortalecimiento físico con el mindfulness (que es lo que conocemos como conciencia plena). Como resultado obtendrás una actitud más positiva ante la vida.

Bowspring funciona de manera suave, sutil y profunda, sin que apenas te des cuenta, por lo que después de practicar te sentirás en equilibrio. Otros de sus beneficios son:

A diferencia del yoga, en Bowspring no es tan importante ejecutar posturas complejas, así que te resultará relativamente fácil practicarlo cuando le cojas el tranquillo. Eso sí, al principio no resulta del todo sencillo, por lo que se recomienda que para empezar asistas un mínimo de 10 horas a la semana durante varias semanas. A partir de entonces podrás practicar media hora al día en casa y acudir a dos clases semanales de 1 hora de duración cada una.

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