Apúntate al método Pilates
Actividad física
Es una actividad física muy recomendable para fortalecer todos los músculos lumbares y pélvicos y conseguir una mejor postura corporal y a la vez que fortaleces el suelo pélvico.
Para aquellas mujeres sanas, que no padecen problemas de suelo pélvico, el método Pilates es uno de los entrenamientos físicos más completos que podemos encontrar en la actualidad, ya que entre sus objetivos se encuentra mejorar la postura general del cuerpo y equilibrar los músculos que rodean la región lumbo-pélvica. Entre estos músculos se encuentran los abdominales y el suelo pélvico, es decir los músculos que participan en la estabilidad del cuerpo, en la sujeción de las vísceras y en la continencia.
El beneficio que nos proporciona este método es que en cada ejercicio se trabaja simultáneamente el fortalecimiento y el estiramiento muscular lo que se traduce en un ejercicio que requiere precisión y mucho control. Por esta razón es importante que si practicas pilates las clases estén supervisadas constantemente por profesores cualificados que tengan en cuenta también la musculatura del suelo pélvico.
El entrenamiento con pilates se utiliza también por muchos fisioterapeutas como técnica de tratamiento para problemas relacionados con la columna, rodilla, cadera… pero siempre tras un diagnóstico y con un programa individualizado, creado específicamente por el fisioterapeuta para la patología concreta del paciente.
¿Quiénes son las mujeres que más se pueden beneficiar de los efectos que genera el método Pilates? Para las embarazadas y las mujeres en edad menopáusica que no tengan problemas de suelo pélvico y deseen prevenirlos, pilates es un entrenamiento muy recomendable.
Pero ojo, si se padecen pérdidas de orina, sienten debilidad en el suelo pélvico que impide mantener su contracción durante los ejercicios, dolores pélvicos o prolapsos (descenso de órganos) es importante acudir previamente a un profesional especializado en suelo pélvico.
Los ejercicios pilates pueden ser demasiado exigentes para un suelo pélvico débil o con problemas y esto puede conllevar que se agrave la situación. Por eso es importante valorarlo, y una vez que se restablezca la actividad normal del suelo pélvico, realizar pilates para mantenerlo en las mejores condiciones.
Fuente: Dra. Carolina Walker