Los ejercicios de Kegel no siempre son efectivos

Técnicamente, se dice que un músculo acortado o tenso está en estado de hipertonía. A menudo se da en mujeres que contraen innecesariamente y de forma involuntaria los músculos del suelo pélvico durante gran parte del día. Al igual que alguien puede tener tensión en los hombros, tú puedes tener tensión en el suelo pélvico. Y al igual que la tensión del hombro puede causar dolores de cabeza, la del suelo pélvico puede causar dolor pélvico. Es decir, depende de cada persona y de cada circunstancia.

Cómo se desarrolla la hipertonía en el suelo pélvico

Hay muchas razones por las que puede aparecer una hipertonía en la zona pélvica. A veces ocurre cuando practicas deportes que dependen mucho de la fuerza interna del muslo. Actividades como patinaje, gimnasia, o natación pueden promover un aumento del tono muscular del suelo pélvico. De la misma forma, hay muchos ejemplos en personas que realizan obsesivamente ejercicios básicos del suelo pélvico hasta provocar una hipertonía. Y también está la incapacidad para vaciar la vejiga por completo, que puede hacer que el suelo pélvico tenga problemas para relajarse. Muchas causas.

Por qué debes estar alerta con esa tirantez del suelo pélvico

El uso constante de los ejercicios de Kegel puede provocar tensión, fatiga y dolor muscular. También incomodidad durante el ejercicio y relaciones sexuales dolorosas. Cierto dolor en la parte baja del abdomenes un buen indicador para detectar la posibilidad de padecer hipertonía. También el dolor en la vagina o el recto, cerca del coxis y alrededor de la vejiga pueden ser signos de esta afección. La dificultad para vaciar el intestino o la vejiga puede ser otra señal. ¡Muy atenta!

Qué se puede hacer con un suelo pélvico hipertónico 

¿Crees que tienes hipertonía? Buenas noticias: tiene solución. Aquí te damos unos consejos muy útiles y con eficacia probada:

• Trabaja cuerpo y mente. Aprender a relajar el músculo suena fácil, pero no lo es tanto. Un estado relajado tanto en el cuerpo como en la mente puede ayudar a cualquier cosa que enfrentemos en la vida. 
• Elimina tensiones en tu vida. Algunos casos de hipertonía del suelo pélvico pueden deberse en parte al estrés y a otros factores psicológicos como la ansiedad y la depresión. Tener un cuerpo más relajado (no solo en el área donde experimenta hipertonía) puede ayudar con la forma en que experimentas los síntomas y cómo te enfrentas a ellos. 
• Crea una mente más relajada mientras lo combinas con cosas como baños tibios, leer un libro, paseos por el campo o el yoga.
• Cuando se trata de incontinencia, tener una rutina puede ayudar. Considera pasar más tiempo en el baño y vaciar completamente la vejiga relajándote plenamente. No lo hagas con prisas, tómate tu tiempo para permitir que la vejiga se vacíe por completo. 
• Estirar el cuerpo y los músculos de la base, así como la respiración abdominal, pueden ayudarte a despertar esta área del cuerpo y asegurarte de que estás vaciando la vejiga por completo. Estos movimientos pueden ayudar a establecer una rutina y también facilitar el proceso.
• Algunos masajes, como la terapia de liberación manual, también pueden ayudar. La terapia manual abarca una serie de técnicas especializadas utilizadas por fisioterapeutas para mejorar la extensibilidad de los tejidos, la movilidad de las articulaciones y disminuir el dolor.
• Los ejercicios hipertónicos del suelo pélvico también pueden ayudar como parte de la terapia. Pero ten en cuenta que esos ejercicios deben ser supervisados por tu fisioterapeuta para asegurarte de que los estás realizando correctamente y de que no causan más dolor o daño.
• Y, como siempre, hablar con un especialista te ayudará a determinar la causa específica de la hipertonía de los músculos del suelo pélvico. Acude a tu ginecólogo o fisioterapeuta para que pueda comenzar el tratamiento correcto para el dolor o malestar que está experimentando.