Tu zona vaginal protegida también en verano

Picor vulvar, aumento del flujo, olor desagradable… generalmente son síntomas de que el ecosistema vaginal está alterado. Y es especialmente frecuente en la menopausia debido a los cambios hormonales. De hecho, un 40% de las mujeres en esta etapa padece vaginitis (inflamación vaginal) provocada por el descenso de estrógenos.

Los cambios hormonales en la menopausia elevan el pH vaginal, hace que perdamos lubricación y la sequedad vaginal entre en escena. Si además padecemos pérdidas de orina, el uso de productos que no están diseñados específicamente para sus características nos generarán mayor irritación.

A esta situación hay que añadirle los ingredientes propios del verano: sudor, cloro de piscina, baños frecuentes, incluso jabones comunes, que van a alterar aún más el pH natural de la zona íntima y debilitar su protección natural.

¿Cómo debemos cuidar la zona vaginal?

• Mantén la hidratación: Combate la sequedad vaginal diariamente. Utiliza productos como el ácido hialurónico, que es un regenerante vaginal natural, la centella asiática, que regenera la mucosa, o algún probiótico vaginal (tampones o cápsulas), que fortalece y reequilibra la flora íntima de la mujer.
• Extrema tu higiene diaria: Además de usar hidratantes, usa jabones con un pH neutro.
• Atención a las pérdidas de orina:  Es esencial que utilices absorbentes diseñados específicamente para las características de la orina, que eviten reacciones alérgicas, irritaciones…  Encuentra en la gama TENA Mujer el producto más adecuado a tu caso. Descubre cuál es.

Fuente: Dra. Gema García Gálvez