En la menopausia, ¡acaba con el autosabotaje!

Estudios recientes demuestran que vivimos la menopausia en función de cómo interpretamos lo que significa para nosotras. Por supuesto, existen síntomas físicos que nos afectan y que pueden hacer que nuestra calidad de vida experimente un empeoramiento mayor o menor en función de su frecuencia e intensidad pero sabemos, por diferentes investigaciones, que lo que más nos influye es cómo interiorizamos lo que nos está pasando y las ideas preconcebidas que tenemos sobre esta etapa.

Vivimos la menopausia, como un reflejo de lo que pensamos de esta etapa

Aunque hayamos heredado muchos estereotipos y creencias de nuestra cultura y de nuestro entorno, podemos aprender a detectar los pensamientos que nos dañan y debemos cuestionarlos cada vez que aparecen.

Es muy importante que tengas claro que siempre hay algo que tú puedes hacer. Esto te dará sensación de control y de poder, para que puedas sentirte más dueña de tu vida en estos momentos en los que, en ocasiones, parece que la naturaleza se esté rebelando contra ti.

Algunos pensamientos habituales en esta etapa son los siguientes:

• “La vida sexual empeora después de la menopausia”. Muchas mujeres afirman haber mejorado su vida sexual al sentirse más liberadas. Asimismo, otras mujeres que han sufrido más cambios físicos, como la sequedad vaginal, han mejorado significativamente su vida sexual después de aprender pautas para paliar estos efectos negativos de la menopausia, como el uso de lubricantes.
• “Ya no soy tan atractiva”. La pregunta que te tienes que hacer es: ¿Qué puedes hacer para sentirte más atractiva? Debes aprender a valorar tu cuerpo a pesar de los cambios y a sacar partido de tus puntos fuertes. Pregunta a tu alrededor, seguro que encuentras a un número muy elevado de mujeres que se sienten más orgullosas de sí mismas, más seguras y más libres en la edad madura.
•  “A partir de ahora son todo médicos y enfermedades”. Es cierto que tienes que ser constante con tus chequeos para prevenir posibles complicaciones. Pero, por lo demás, puedes seguir con tu vida como lo has hecho hasta ahora. Lo importante es no abandonarte y llevar una vida saludable.
• “Mi vida está hecha, se han pasado mis oportunidades”. ¿No conoces a nadie que haya vuelto a empezar o que haya cumplido un sueño a partir de los 45 años? Tienes muchas cosas a favor: tu experiencia, tu sabiduría, tu fortaleza… seguro que en general te sientes más dueña de ti misma. Piensa en lo que quieres, ponte una meta y lucha por ella.

Fuente: Alicia Jiménez, psicóloga