Ayudan a abordar el estrés oxidativo
El estrés oxidativo, causado por compuestos de los llamados radicales libres altamente reactivos que circulan en la sangre, es un factor crucial en el desarrollo de la mayoría de las enfermedades. Los antioxidantes barren estos radicales libres. Por eso, parece obvio que tomar suplementos antioxidantes protege nuestra salud. Pero, ay, la vida no es tan simple como eso.
La mayoría de análisis de estudios muestran que las personas que consumen masivamente suplementos de antioxidantes como los anteriormente mencionados no viven más que quienes no los toman. De hecho, tienen un mayor riesgo de muerte. Son hallazgos interesantes, pero tampoco hay que llevarlo hacia la literalidad. Una cosa es el uso y otro es el abuso.
Antioxidantes a partir de los 50
Lo cierto es que si eres de aquellas a las que les va bien tomar antioxidantes y lo hace de forma pautada –es decir, bajo supervisión médica–, estás en el lado correcto. Los consumidores pueden confiar en sus suplementos antioxidantes como siempre lo han hecho. Se trata por lo general de un excelente complemento si ya haces ejercicio y llevas una dieta equilibrada.
La mayor parte de las revisiones de estudios indican que la menopausia es un periodo crucial para la mujer, que asiste a ciertos déficits provocados por el baile hormonal. Durante este período de tiempo bajan los niveles de estrógeno, un antioxidante. Esto conduce al estrés oxidativo en varios tejidos, lo que a su vez lleva al desarrollo de una variedad de síntomas y patologías que marcan ese fastidio que es la menopausia. En concreto, el estrés oxidativo se ha relacionado con un mayor riesgo de osteoporosis y enfermedades cardiovasculares y una mayor frecuencia de síntomas vasomotores.
Se han empleado una multitud de terapias para abordar este déficit de estrógeno, pero hay muchas mujeres que no pueden con los efectos secundarios. Por eso, la suplementación con antioxidantes es muy popular para ayudar a calmar los síntomas de la menopausia. Pero los expertos alertan de la necesidad de ponerse en manos de especialistas.
“En general, y debido a que ahora hay disponible una amplia variedad de opciones de tratamiento para prevenir y revertir los efectos negativos del estrés oxidativo asociado con el envejecimiento reproductivo, el tratamiento específico seleccionado debe elegirse en función de la historia y la presentación clínica del paciente”, señala el estudio “El papel del estrés oxidativo en la menopausia”, publicado en The Journal of Mid-life Health.
Tomar antioxidantes de forma segura
Está absolutamente demostrado que una dieta concentrada en alimentos ricos en antioxidantes, especialmente frutas y verduras, es beneficiosa para la salud, en general. Sin embargo, la relación entre los antioxidantes suplementarios y la prevención de enfermedades es menos clara, como ya se ha sugerido.
Muchos estudios han demostrado que tomar suplementos que contienen dosis concentradas de antioxidantes puede beneficiar ciertos aspectos de la salud. Por ejemplo, se han relacionado los suplementos antioxidantes, incluidas las grasas omega-3, la curcumina, el selenio, el resveratrol y la vitamina C, con varios resultados beneficiosos para la salud.
Sin embargo, aunque ciertos antioxidantes pueden brindar beneficios para la salud cuando una persona los toma por una razón específica, esto no significa que tomar suplementos de antioxidantes siempre sea seguro o necesario en todos los casos. Además, los estudios han demostrado que los suplementos antioxidantes en dosis altas pueden ser dañinos en ciertos grupos de mujeres.
Todo esto indica que tomar suplementos de ciertos antioxidantes puede alterar la red de defensa antioxidante natural del cuerpo e incluso dañar la salud cuando se consumen de manera inapropiada. Los expertos no recomiendan que las personas tomen suplementos de antioxidantes en dosis altas a menos que lo recomiende específicamente un especialista.
La mejor manera de ingerir antioxidantes es a través de alimentos y bebidas como verduras, frutas, nueces, pescado, especias y té. Pero es cierto que a veces con la alimentación no llega, y esto es algo que se hace más evidente con el paso de la edad. Ahí es donde los suplementos pueden cumplir un papel relevante. Pero, siempre, bajo supervisión médica.