5 hábitos fitness para sentirte estupenda a cualquier edad
Actividad física
Hacer frente o prevenir los cambios que llegan con la menopausia, como la temida osteoporosis, no es algo que haya que dejar para ese momento: cuanto antes adoptes estos hábitos fitness, mejor te sentirás ¡tengas la edad que tengas!
A todas nos gusta sentirnos bien, en forma, activas y sanas, ¿verdad? Llegar a este objetivo es posible a cualquier edad si adoptamos unos sencillos hábitos fitness: ¡se acabaron las excusas para no estar estupenda!
Los expertos aseguran que repetir una acción durante 21 días basta para integrarla en nuestra rutina, por eso hemos preparado una serie de trucos que no te costará seguir. De esta forma, se convertirán en parte de tu jornada y, sin esfuerzo, te darás cuenta de los cambios beneficiosos que tendrán lugar en tu cuerpo e, incluso, en tu mente: vas a ver los retos de forma más positiva y contarás con las armas necesarias para enfrentarte a ellos.
Hábitos fitness
1-Realiza ejercicio a diario. Treinta minutos son suficientes para estar en forma. Prueba con la marcha nórdica: no importa tu peso, condición física o edad; esta forma de deporte moviliza el 90% de la musculatura andando a un paso más vivo de lo normal por caminos amplios y ayudándote con unos bastones. Los beneficios son enormes: multiplicará tu nivel de endorfinas, lo que hará que te sientas más positiva, te ayudará a perder peso o a mantenerlo a raya e incrementarás tu confianza y tu fuerza. Esto es especialmente importante en la menopausia, pues los ejercicios de resistencia ayudan a aumentar la densidad ósea.
2-Trabaja la flexibilidad. Integra en tu tabla semanal el yoga (o body balance, que combina esa disciplina con pilates y taichí al ritmo de la música)… o lo más novedoso: el ballet fitness, una especialidad con la que, además, ganarás elegancia en tu postura y tus movimientos. Tus articulaciones agradecerán la elasticidad que irás adquiriendo y, además, reducirás tu nivel de estrés.
3-Cuida tu alimentación. Ya sabes lo importante que es comer correctamente (e incluso tomar los alimentos adecuados según la hora del día): evita los fritos, los azúcares y los ultraprocesados y apuesta por las carnes magras, la fruta, la verdura y, atención, los frutos secos. Normalmente, éstos y las semillas como las pipas de girasol o calabaza suelen evitarse por su “mala fama”, pero aportan grasas buenas, ácidos omega 3 que son necesarios para tu organismo, y, además, resultan saciantes gracias a la fibra que llevan. Si tu objetivo es quitarte esos kilitos de más, lo conseguirás en poco tiempo, pero también te sentirás más activa y sana. ¡Pronto notarás los resultados!
4-Toma el sol… de forma “trendy”. Date un capricho y ve a alguna de las playas urbanas que ofrecen muchas ciudades o a la piscina de la azotea del hotel con mejores vistas de tu localidad. El sol hace que tu cuerpo produzca vitamina D y ésta ayuda a absorber el calcio, imprescindible para los huesos. Ten moderación: no te expongas durante las horas centrales del día, cúbrete la cabeza y utiliza protector solar. De esta forma, además, evitarás las manchas en la cara y prolongarás otro de los efectos de una alimentación sana, que es una piel más luminosa: ¿qué tal un batido “détox” o un smoothie mientras te relajas? Hablando de belleza; cuando vuelvas a casa, aplica en tu cara, cuello y escote tu tónico habitual, previamente enfriado en la nevera.
5-Bebe agua. Nada de zumos prefabricados (tienen una cantidad de edulcorante muy poco recomendable) y cuidado con los naturales, pues los que llevan plátano, uvas o frutas muy dulces también concentran demasiado azúcar. Por supuesto, los refrescos están prohibidos; sustitúyelos por infusiones. Tomar dos litros de agua al día reduce el dolor de las articulaciones, rebaja la sensación de hambre, mantiene los riñones en perfecto estado de funcionamiento y previene infecciones de orina, te libra de toxinas (con el beneficio para la piel que eso implica) y combate el estreñimiento, entre muchos otros beneficios.
Quizá ya tenías alguno de estos hábitos en tus rutinas diarias; ¿te atreves a integrarlos todos? ¡Prepárate para explicar a tus amigas lo sencillo que es cuidarse!