Síndrome de Cushing: la enfermedad de la cara de luna llena que se desarrolla por exceso de cortisol
Mujer y bienestar
Dicen que el síndrome del Cushing es una enfermedad rara, pero muchas mujeres de entre 40 y 55 años la padecen sin que lo sepan. También es conocida como la enfermedad de la cara de la luna llena y se desarrolla por un exceso de cortisol.
A veces ocurre que a una enfermedad se le pone la etiqueta de «rara» porque está infradiagnosticada. Es el caso del llamado síndrome de Cushing. Se da tres veces más en mujeres que en hombres, y más especialmente en el grupo de pre y posmenopáusicas. Y en bastantes más casos de los deseables la enfermedad evoluciona sin que quien la padece acuda a consulta. Se conoce también con el muy descriptivo nombre de la enfermedad de la cara de la luna llena y tiene al cortisol como protagonista.
¿Cómo se podría definir el síndrome de Cushing? Brevemente, se trata de una afección en la que el cuerpo se expone a un exceso de cortisol (cortisol alto) debido principalmente a que el organismo haya producido demasiado de esta hormona o a que se hayan tomado muchos corticosteroides orales. Efectos visibles: cara redondeada, una joroba de grasa entre los hombros, estrías de color rosado o púrpura en la piel… Efectos subyacentes: presión arterial alta, pérdida ósea de masa ósea, diabetes tipo 2…
¿Qué es el cortisol?
El cortisol es una hormona producida por las glándulas suprarrenales y afecta a muchas funciones corporales diferentes. Se produce en cantidades variables a lo largo del día. Los niveles generalmente son más altos por la mañana y más bajos por la noche. Se producen cantidades más altas en momentos de estrés. Sin embargo, en el síndrome de Cushing, el cortisol alto se da constantemente.
Numerosos estudios, como el publicado en el Journal of Clinical Endocrinology & Metabolism en 2020, han demostrado que las mujeres pre y posmenupáusicas, y especialmente aquellas con síntomas severos como los sofocos, tienden a elevar sus niveles de cortisol, la llamada «hormona del estrés». Probablemente tenga que ver con la disminución del estrógeno. Estos niveles elevados pueden contribuir a síntomas como el insomnio, la fatiga, el aumento de peso y cambios en el estado de ánimo. Por eso es tan importante para las mujeres situadas en una franja sobre los 50 años que midan y controlen sus niveles de cortisol.
¿Cuáles son los síntomas del síndrome de Cushing?
Los síntomas del síndrome de Cushing son variados y conviene vigilarlos. Algunos incluyen:
- Cara redondeada.
- Aumento de peso, especialmente alrededor del torso.
- Una joroba entre los hombros.
- Sensación de cansancio o mal humor.
- Problemas en la piel como cicatrización lenta de heridas, hematomas y estrías en el abdomen y los muslos.
- Disminución de la libido (deseo sexual).
- Más vello facial y corporal, y menstruaciones irregulares.
¿Qué causa el síndrome de Cushing?
El síndrome de Cushing puede estar causado por varias razones. Algunas de las principales son:
- Un crecimiento excesivo de las glándulas suprarrenales, que también puede generar un exceso de cortisol.
- El uso prolongado de corticosteroides (esteroides), que, en algunos casos, pueden afectar los niveles de cortisol.
- Un tumor en la hipófisis, una glándula del tamaño de un guisante ubicada en la base del cerebro, que produce hormonas y puede hacer que las glándulas suprarrenales liberen demasiado cortisol. También, un tumor en otras partes del cuerpo.
Es importante destacar que tener el síndrome del Cushing no significa que necesariamente haya un tumor involucrado; el cortisol es una hormona esencial para el funcionamiento del cuerpo y sus niveles pueden verse alterados por diversos factores más comunes y menos graves.
Nota importante: Si crees que el síndrome de Cushing está relacionado con el uso de esteroides, no dejes de tomarlos de manera abrupta. Es fundamental que consultes con tu médico para recibir el tratamiento adecuado.
¿Como se trata el síndrome de Cushing?
Como ya te hemos dicho, el síndrome de Cushing es una enfermedad infradiagnosticada porque quien la padece muchas veces no va a consulta o lo hace tarde. Debes ver a tu médico si presentas alguno o varios de los síntomas descritos anteriormente. Y si te han diagnosticado síndrome de Cushing, deberás consultar a tu médico regularmente para que pueda controlar tu afección y asegurarse de que estés recibiendo el tratamiento adecuado.
Puede ser una enfermedad difícil de diagnosticar, ya que sus síntomas pueden ser comunes a muchas otras afecciones. Lo normal es que te pidan análisis de sangre, orina y saliva para medir tus niveles de cortisol. Si tu cortisol es alto, tu médico podría recomendarte una tomografía computarizada o una resonancia magnética del cerebro o las glándulas suprarrenales para identificar la causa. También podría derivarte a un endocrinólogo para estudiar posibles causas hormonales.
Recibir un diagnóstico de cortisol alto en mujer o de síndrome de Cushing puede ser abrumador al principio al ser una enfermedad poco común, pero es importante saber que no estás sola y que hay tratamientos eficaces disponibles. Identificar a tiempo un problema como el cortisol alto es el primer paso hacia una mejor calidad de vida. Mantén la calma, confía en el proceso y recuerda que con apoyo profesional y un buen tratamiento, el síndrome del Cushing se puede controlar.