Perder a tu pareja, la persona que has amado tanto o aquella con la que quizás planeaste pasar el resto de tu vida, es uno de los peores dolores imaginables. La conmoción puede dejarte en shock con una mezcla de incredulidad y desesperanza. Durante un tiempo será un viaje difícil a través de los muchos altibajos emocionales. Pero lo más probable es que en algún momento te sientas preparada –y hasta deseosa- de volver a tener intimidad con alguien. Sería lo perfecto. Pero ¿y ahora qué?
Nuevas emociones
Esto puede ser algo puramente físico y sexual, pero tal vez te encuentres enamorándote de alguien al experimentar una conexión emocional más profunda. No existe una cantidad de tiempo “correcta” para esperar antes de sentir algo especial por alguien nuevo, ya sea una simple atracción física o algo más. Y conocer a una nueva persona o tener relaciones sexuales con alguien nuevo no significa que ya no estés afligida o que te preocupes menos por aquella relación que se fue. ¡Fuera culpas!
Sin embargo, también es natural que tener relaciones sexuales con alguien nuevo después de la muerte o marcha de la pareja anterior genere emociones complejas y desafiantes. La pérdida te cambia y el duelo te lleva a lugares desconocidos donde el futuro parece incierto. “La clave para aceptar una nueva pareja en tu vida es conocer a esa nueva persona, que eres tú, que ha cambiado desde la pérdida. Date el espacio que necesitas para explorar tu nuevo yo primero”, afirma la psicóloga clínica Elena Jiménez.
No hay prisas
Aunque la vida que alguna vez tuviste cambia para siempre después de un adiós, todavía puedes volver a tener una vida feliz y divertida. No hay prisa por tener intimidad si no te apetece. La intimidad con una nueva pareja puede llevar tiempo y, en el caso de una pérdida traumática, es posible que necesites incluso más. Tómate todo el tiempo que necesites para explorar esta nueva relación. “Si sientes deseo sexual, acepta el miedo y las dudas con autoestima y compasión. Puedes lamentar la pérdida de tu pareja a la vez que aceptas la nueva relación. La tristeza y la alegría pueden coexistir en un valioso equilibrio”, destaca Elena Jiménez.
Es normal pensar en la persona que perdiste
Cuando estés con tu nueva pareja, es posible que pienses en la antigua. De hecho, lo raro sería que no lo hicieras. El amor que alguna vez compartisteis sigue ahí. “Intenta relajarte, respirar, calmar tu mente y estar presente en el momento”, aconseja Elena Jiménez. En este sentido, una comunicación sana es esencial a la hora de construir una nueva relación después de una pérdida. Expresa lo que necesitas emocional y físicamente a tu nueva pareja y escucha lo que ella necesita de ti manteniendo una conversación abierta, respetuosa y honesta.
Trátate bien a ti misma y déjate ayudar
Si sientes algún tipo de resistencia en lo que respecta a la intimidad, es importante explorar el motivo, las emociones y sentimientos que hay detrás de ello. No temas en buscar la ayuda de un consejero o terapeuta que te ayude a superar los obstáculos que estás experimentando.
Seguramente te aconsejen alejarte en lo posible de ese sentimiento de culpa que te puede llegar a atormentar. “La culpa por avanzar demasiado rápido es muy común y normal, ya que puedes sentir que estás ‘traicionando’ a tu antigua pareja”, señala Elena Jiménez.
Mantener vivo el recuerdo de tu ser querido mientras se abraza una nueva relación puede ser complicado, especialmente cuando se trata de aniversarios y días festivos. “Llegados a este punto, la clave es hacer lo que a ti te parezca correcto y encontrar formas de combinar los hermosos recuerdos del pasado y las nuevas experiencias en tu vida que te están volviendo a llenar”, añade la especialista.
Trabaja en curar tu dolor
Esta es una transición importante en la vida y es crucial encontrar tiempo y espacio para reflexionar sobre la pérdida y superar el dolor. Sigue trabajando en ello, ya que te ayudará a ser más consciente de tu fuerza y capacidad para construir un futuro que no creías posible.
Empodérate y distingue las opiniones y consejos valiosos de los que no lo son. No permitas que lo que digan los demás influyan en tus decisiones. “Hacer lo correcto para una es vital cuando se construye algo nuevo con alguien nuevo, ya sea una relación seria o menos seria”, resume Elena Jiménez.