Tu agenda la marcan… los ritmos circadianos
Menopausia
Quizá has notado que siempre tienes hambre, sueño o te despiertas a la misma hora, independientemente de lo mucho o poco que hayas dormido. Los responsables son los ritmos circadianos, que también rigen sobre la temperatura o la coordinación de tu cuerpo. Si conoces cómo actúan, podrás aprovechar mejor el día.
Ya te hablamos de ellos cuando te contamos cuáles eran las mejores horas para tomar los distintos alimentos: los ritmos circadianos, producidos por nuestro reloj biológico, rigen múltiples variables, como la sensación de hambre y sed o la temperatura. Estos cambios físicos, mentales y de conducta siguen un ciclo diario que se ajusta, fundamentalmente, a la luz y la oscuridad a las que se expone nuestro cuerpo: dormir por la noche y estar despierta durante el día es un ejemplo de dichos ritmos.
Al definir los patrones de sueño y alimentación, la digestión, la actividad cerebral y de los ejes hormonales o la regeneración celular, es evidente que su alteración conlleva efectos negativos importantes a corto plazo (piensa en el jet-lag, por ejemplo, tras un viaje largo que nos obliga a estar despiertos más horas de las habituales, adecuándonos a más o menos horas de sol en nuestro destino). De hecho, los ritmos circadianos irregulares se relacionan con varias afecciones crónicas, como trastornos del sueño, obesidad, depresión o trastorno bipolar.
Pero su influencia va mucho más allá, determinando diferentes funciones según el momento de la jornada: así, si conoces cuándo estás en estado de máxima alerta o a qué hora es mejor tu coordinación, podrás adecuar tus actividades a esos períodos, sacando el máximo provecho de ellas. ¡Convierte estos ritmos en tus aliados echando un vistazo al siguiente horario!
Tu ritmo diario, hora a hora
Así actúa tu cuerpo, regido por los ritmos circadianos, en una jornada normal:
06:45. Mayor incremento de la presión sanguínea.
7:30. Se detiene la secreción de melatonina, hormona que interviene en el ciclo natural del sueño. Lo ideal sería que el despertador sonase después de esta hora, pero ya sabemos que no siempre es posible…
08:30. Reactivación del intestino.
09:00. Nivel más alto de testosterona.
10:00. Estado de máximo despertar. Si tienes una reunión importante, éste es el mejor momento para ella.
14:30. Mayor coordinación. Prueba a ir al gimnasio a esta hora: tus movimientos serán mucho más precisos y efectivos.
15:30. Mejor velocidad de reacción.
17:00. Más eficacia cardiovascular y fuerza muscular. Si realizas ejercicios aeróbicos, resérvalos para la tarde.
18:30. Mayor elevación de la presión sanguínea.
19:30. Temperatura corporal más alta.
21:00. Comienzo de la secreción de melatonina. Tu cuerpo se prepara para dormir, así que evita sustancias (cafeína, teína, etc) o actividades que puedan alterarlo: favorecerás un mayor descanso.
22:00. El sistema digestivo se hace más lento. Deberías cenar antes, a las 20:00 o 21:00, como muy tarde, para evitar engordar.
22:30. Interrupción de los movimientos intestinales.
00:00. Producción creciente de vasopresina durante la noche (anula la sensación de sed).
02:00. Sueño más profundo.
04:30. Temperatura corporal más baja.
¿Reconoces este horario en tu cuerpo? Empieza a aprovechar las ventajas de saber a qué hora funciona mejor y notarás la diferencia.